Los empresarios señalan que tienen entre un 15 y 20% de atraso en el precio y que pierden rentabilidad.
Martín Pérez, presidente de Ceseca, señaló que “no son escuchados por el Gobierno nacional” y que le piden a las petroleras que “vean por sus operadores y busquen la actualización de precios”.
El estacionero señaló que las Pymes atraviesan por un grave proceso de falta de rentabilidad y descapitalización como consecuencia de políticas económicas que determinaron el congelamiento del precio de los combustibles líquidos a valores de mayo del 2021, mientras que los costos, como salarios y tarifas, evolucionan al ritmo del fuerte proceso inflacionario.
“Es una situación delicada que excede la crisis económica que está viviendo el país, porque es uno de los sectores más perjudicados del país al congelar el precio del combustible. Desgraciadamente, desde el 16 de mayo del 2.021, las estaciones de servicio están con el precio congelado, los niveles de venta siguen bajos, enero y febrero son meses de venta estacionalmente malos, a eso se suma que los salarios, las tarifas, la energía y todos los gastos siguen el proceso inflacionario que ronda el 50%”, explicó Pérez.
Para graficar la difícil situación, detalló que muchos estacioneros tuvieron que pedir créditos para poder pagar el aguinaldo.
“Se está tramitando ante las empresas petroleras porque la situación nuestra la conversamos con las petroleras, el Gobierno no nos escucha. El mensaje se está generalizando en todo el país a los efectos de que la Secretaria de Energía o las petroleras tomen alguna medida porque hay operadores seriamente comprometidos. La rentabilidad es muy baja y están en un proceso de descapitalización”, aseguró.
Explicó que el atraso de precios que tienen ronda entre el 15 y 20% y que a nivel internacional es mucho más. “En Misiones y Corrientes tienen serios problemas porque los vecinos vienen a comprar combustible a la Argentina”, indicó Pérez.
