Al respecto, el jefe del programa Sala de Situación, Miguel Astudillo, dijo que en este período las áreas operativas sanitarias han comunicado 47 casos de síndrome febril inespecífico, ninguno de los cuales fue confirmado por laboratorio como dengue, zika o chikungunya.
“Comparando con igual período del año 2018, la cifra es muy similar, ya que el año pasado fueron 42 los casos sospechosos”, expresó el funcionario, señalando que en los departamentos San Martín, Orán, Rivadavia y Anta es donde más se registran casos.
Una vez que el sistema sanitario detecta un caso febril da intervención al vigilante epidemiológico del área operativa para el diagnóstico por laboratorio, que puede hacerse en Tartagal, Orán, Salvador Mazza, Embarcación y hospital Señor del Milagro de la capital.
Las autoridades sanitarias informaron que en Colonia Santa Rosa, Morillo, Salvador Mazza, Embarcación, Orán, Tartagal, Las Lajitas, Joaquín V. González, El Quebrachal, El Galpón, Metán, Campo Santo, General Güemes, Apolinario Saravia, General Pizarro, General Mosconi, Cerrillos y La Merced se coordinaron tareas de descacharrado para eliminar posibles reservorios del mosquito Aedes aegypti. Las actividades continúan en localidades del Valle de Lerma. Los controles focales, para eliminación de larvas del mosquito, se realizan en General Güemes, Tartagal y Urundel, con participación del Servicio Nacional de Control de Vectores, Epidemiología de la Provincia, municipios y hospitales cabecera de área operativa.
Ante la llegada del período estival que facilita la proliferación de criaderos de mosquitos en las viviendas y espacios peridomiciliarios, la cartera sanitaria reiteró la importancia de reforzar las medidas de prevención. En este sentido recomendó revisar y limpiar patios, jardines, canaletas y todo lugar donde pueda acumularse agua, desechando todo objeto que pueda servir para que el mosquito deposite sus huevos y se reproduzca.