Indignación e impotencia por el “destrato e indiferencia” a manos de autoridades provinciales, es la sensación que manifestaron, e invade a las 70 personas, que desde el viernes se encuentran apostadas en Plazoleta IV Siglos, a la espera de una respuesta favorable, que contemple en el cargo de directora, a la docente wichi.
Hasta el momento, la respuesta desde el Ministerio de Educación es intransigente, y argumenta que la maestra no cumple con los requisitos. En tanto, en la jornada de ayer, el Ministro de Gobierno, Justicia y Derechos Humanos, Marcelo López Arias, recibió a un grupo de manifestantes, escuchó el reclamo, pero según plantearon desde la comunidad, la solución no asomó.
Leonardo Pantoja, representante de la Comisión Nacional de Investigación para el Resarcimiento Histórico de las comunidades originarias expresó a Nuevo Diario su indignación por el silencio de las autoridades provinciales:
“Nosotros sabemos nuestros derechos, y sin embargo ellos (el gobierno), dicen que no los tenemos”, sostuvo y lanzó: “Somos la nación wichi, y los sinvergüenzas son ellos, que no tienen capacidad de solucionar este problema”, además de responsabilizar a las autoridades, por cualquier posible consecuencia en los miembros manifestantes, y en el marco de esta protesta.
Capítulo aparte, y que arrancó indignación en Pantoja, fue la pregunta sobre el acompañamiento del IPPIS enfatizó que “no existe esa organización, nos discriminaron”, concluyó.
“No somos los indios de 1492”
Octorina Zamora, dirigente de Misión Chaqueña, reiteró a Nuevo Diario: “No vinimos a buscar una coordinación, sino la designación a esta joven wichi”, y ante la propuesta de la creación de un cargo de coordinación, señaló que se solicitó por escrito la propuesta, para decidirlo en asamblea.
Zamora analizó que: “La Junta Calificadora que evalúa a los postulantes está copada por la ADP, que hoy por hoy está cuestionada por corrupción, y no tienen autoridad moral”.
En ese sentido repudió los dichos desde el ministerio acerca de que una designación violaría la Ley de Educación: “Ellos violan las leyes todos los días, cuando la gente pasa hambre, cuando autorizan desmontes sabiendo que es ilegal”, agregó.
La representante wichi endureció sus dichos indicando que: “Lo que pasa es que nosotros ahora no somos los indios de 1492, ahora nos informamos de todo lo que dicen y mienten”.
Al reclamo, se le sumaron otros problemas en el estado de salud de sus miembros, dos de los cuales debieron recibir atención médica, además de las condiciones precarias en las que se encuentran, por lo que también requirieron a la comunidad, la colaboración con alimentos, ropa, elementos de higiene personal, y agua.
Presiones del intentendente Llaya
Consultada por la información acerca de las versiones de división dentro de la comunidad, por este tema docente, Octorina aclaró: “Como siempre que hay un conflicto justo y real, siempre aparecen los boicots”, e indicó que “se aprovecharon de los hermanos que tienen vicios, los manipulan”.
Zamora agregó que quienes firmaron el documento en contra de la lucha de la comunidad fueron “presionados por gente del intendente de Embarcación, Alfredo Llaya”.