Sucede habitualmente que ante una tormenta las aguas de las acequias de las fincas de la zona bajan hacia el sector de la ruta provocando con ello que se impida la circulación de los vehículos.
Las molestias son constantes cada vez que hay una precipitación de cierta importancia. La situación también se produce en zonas del municipio de El Carril así como el de Coronel Moldes.
El reclamo de los jefes comunales de esta zona del Valle de Lerma es constante y no se logra que se concrete la nueva traza de la ruta nacional 68, en principio porque sería en parte negativo para las comunas ya que no atravesaría los pueblos citados.
Pero es imprescindible que se expropien tierras de los productores tabacaleros y de otros productos para ejecutar la obra y se evite en definitiva los cortes de tránsito que afectan al turismo y la intercomunicación entre esos pueblos.