Las comunas del departamento Anta solicitaron elementos de primera necesidad para contener a familias de la comunidad wichí de Enacore que fueron afectadas por las intensas lluvias.
La dirección de Asistencia Crítica de la Provincia trabaja en coordinación con las autoridades municipales de Apolinario Saravia y General Pizarro, que solicitaron el refuerzo de elementos de primera necesidad para contener a familias de esa comunidad indígena.
Apolinario Saravia solicitó 30 módulos alimentarios de emergencia, 30 colchones, 30 juegos de sábanas, 30 frazadas, 15 pares de zapatillas y 20 juegos de joggins para cubrir a aproximadamente a 60 familias que fueron afectadas por el anegamiento que provocaron las intensas lluvias.
Asimismo, el municipio de General Pizarro solicitó por su parte, 50 módulos alimentarios de emergencia, 20 colchones de 2 plazas, 30 colchones de 1 plaza, 50 frazadas, 50 sábanas, 10 paquetes de pañales, 15 pares de zapatillas para asistir alrededor de 100 familias de la etnia wichí.
Ambos municipios están trabajando coordinadamente y los elementos solicitados por la emergencia fueron retirados en la mañana de ayer del depósito que posee la provincia en la ciudad de Tartagal.
Cabe destacar que el organismo de Desarrollo Social se encuentra en permanente comunicación con las autoridades municipales, realizando los relevamientos correspondientes y fortaleciendo el protocolo de asistencia que organiza cada comuna.
Las familias afectadas
Las inundaciones por las crecidas de ríos y sus desbordes continúan en el interior provincial tras las intensas precipitaciones que hubo en las últimas jornadas.
Esto ocurrió en la jornada de ayer atento a que efectivos de la unidad Regional N° 5 del departamento Anta trabajaron de manera conjunta con el municipio de Joaquín V. González para asistir a las familias que vieron anegadas sus viviendas.
Lo propio sucedió en el pueblo de Luis Burela donde varias familias debieron ser evacuadas.
Durante la madrugada y la mañana de ayer se produjeron precipitaciones con una gran caída de agua en el departamento de Anta, con registros superiores a los 100 milimetros.
En el caso de la localidad de Luis Burela fueron asistidas 70 personas entre mayores y niños, quienes fueron evacuados hacia el barrio 105 Viviendas de mayor altura en su terreno y hacia la localidad cercana de General Pizarro. La situación derivó de la fuerte crecida del río Dorado.
Cabe consignar que en los últimos años estas consecuencias también la padecieron los pobladores de Las Lajitas así como los de Apolinario Saravia, ubicados en esa área de emergencia. Nuevamente los desmontes están en la mira, ya que al no haber suficiente árboles y pasturas no se retiene el agua en el suelo y escurre generando mayor crecida de los ríos.
La gravedad de lo ocurrido en Luis Burela se observó en los registros fotográficos y filmaciones que se dieron a conocer, con gran presencia de barro en las casas tras el retiro del agua, con pérdidas de mobiliario y artefactos eléctricos del hogar.
Mientras que en la ciudad de Joaquín V. González se asistió a seis familias que sufrieron el ingreso de agua en sus viviendas.
Además en la víspera hubo alarma en la población de San José de Orquera, en jurisdicción del municipio de El Galpón, departamento de Metán.
Allí el desborde del río Juramento, provocó el corte parcial de la ruta provincial 29 y el anegamiento de viviendas de siete familias.
Los afectados fueron trasladados hacia el establecimiento educativo del lugar.
Pasado el mediodía de la víspera se informó que no se registraban nuevas lluvias y que las rutas nacional 16 y provincial 5 estaban transitables.