Además reclaman material de trabajo, y la incorporación a planta de algunos empleados. En paralelo desde el Hospital de San Carlos también iniciaron un reclamo. No obstante, por ambos reclamos, los trabajadores suspendieron las medidas de fuerza hasta la conciliación obligatoria, pautada para el día jueves pasado el mediodía.
Cristian Haviar representante sindical de ATE en los Valles Calchaquíes dijo a Nuevo Diario: “Para los municipales el reclamo fundamental tiene que ver con el aumento e incorporación a planta de algunos contratados que prestan servicios desde hace más de 17 años, y cobran $4 mil, pese a que se comprometieron a un aumento que nunca lo pudieron cumplir”, dijo el sindicalista.
Advirtió que en el municipio existirían algunas incorporaciones y desplazamientos “a dedo” por parte del Municipio, además de la reapertura de paritarias, atento a que el índice inflacionario superó al porcentaje de aumento que tuvo el sector.
En cuanto al hospital local, reclaman el cumplimiento de las negociaciones que mantuvieron en el mes de junio pasado, cuando los trabajadores realizaron un acampe en las puertas de la casa de gobierno provincial, por la precarización de sus condiciones laborales: “Si bien solucionaron el problema de cinco, la situación la sufren muchos más”, informó Haviar.