A lo largo y a lo ancho del país, los obispos argentinos presidieron esta celebración, y junto con las del triduo pascual, que incluye la misa de la Cena del Señor, la conmemoración de la Pasión y la vigilia pascual solemne, integran los ritos de los temas centrales que junto con la Navidad son el centro de la fe cristiana.
“La Cruz camino de obediencia no se puede negociar”. Con esta frase el papa Francisco, inició su homilía de Domingo de Ramos, luego se refirió al camino que Cristo hizo cuando compartió y se regocijó con el pueblo, con los jóvenes que gritaban su nombre aclamándolo como Rey y Mesías (…).
"Pero también “el corazón de Cristo está en otro camino, en el camino santo que solo él y el Padre conocen: el que va de la «condición de Dios» a la «condición de esclavo», el camino de la humillación en la obediencia «hasta la muerte, y una muerte de cruz»”.
Este domingo además de la celebración de la fe cristiana se celebró la XXXIV Jornada Mundial de la Juventud.
“Con la cruz no se puede negociar, o se abraza o se rechaza. Y con su humillación, Jesús quiso abrirnos el camino de la fe y precedernos en él”.
Finalmente el Pontífice, señaló que Jesús, en su Pasión vence también a la tentación de responder, de ser “mediático”. “En los momentos de oscuridad y de gran tribulación hay que callar, tener el valor de callar, siempre que sea un callar manso y no rencoroso. La mansedumbre del silencio hará que parezcamos aún más débiles, más humillados, y entonces el demonio, animándose, saldrá a la luz”. Será necesario resistirlo en silencio, “manteniendo la posición”, pero con la misma actitud que Jesús.
Parroquias colmadas en Salta
La Catedral y las parroquias salteñas colmadas de gente, también enaltecieron la cruz y la obediencia de Jesús que además muere por el sufrimiento de los más vulnerables.
“La sociedad actual atravesada por desigualdades debe volver a Jesús y cada cristiano llevar fe a cada sufriente”, se centraba en ese aspecto la homilía de las parroquias.
Así tanto las catedrales, como los templos diocesanos, más pequeños llevan adelante el ritual tradicional de la bendición de ramos de olivo, la procesión y la lectura de la Pasión del Señor.
El jueves 18 de abril, Jueves Santo, comenzará el solemne triduo pascual, con la Misa Crismal, en la que el obispo diocesano bendice los óleos y los sacerdotes renuevan sus promesas. Mientras que, por la noche, con la misa de la Cena del Señor, se realiza el tradicional gesto del lavatorio de los pies.
El Viernes Santo, único día que no hay misa, se medita la Pasión del Señor, con el rito de la adoración de la Cruz y hay celebración de la Palabra y Comunión; y el Sábado Santo por la noche se celebra la solemne Vigilia Pascual y a partir de ese momento, los cristianos vivirán la alegría de la Resurrección de Cristo, que se prolongará a lo largo de cincuenta días.
