Fue la misma ministra de Asuntos Indígenas, Edith Cruz, quien puso en conocimiento del titular del INADI en Salta, Alvaro Ulloa, sobre un hecho ocurrido el 27 de abril pasado, cuyas imágenes tomadas por video se viralizaron en las redes para publicarse luego en los medios de difusión.
En estas imágenes, relató Cruz en su denuncia, se puede apreciar a un grupo de personas de Santa Victoria, al aprehender a "un hermano originario, acusándolo de un supuesto hurto de botas, zapatillas y otros elementos". Indica que se dispone un escrache en contra del joven en donde se lo trata de "mataco, mañero" entre otros insultos proferidos por los atacantes.
Cruz repudió "la condena social a la que el supuesto culpable fue sometido, sin derecho a defensa alguna, la intimidación numérica, y a las manifestaciones discriminatorias realizadas a este hermano originario, por su sola condición de pertenencia indígena, las cuales a modo de escrache fueron difundidas por las redes sociales, es decir públicas y por los medios de comunicación".
Apuntó contra Diego Tapia Alonso quien, dijo la ministra, es un criollo de Santa Victoria Este que formuló la denuncia penal contra el joven en la Comisaría local por hurto. Lo hizo al promover la denuncia por los "actos de discriminación y manifestaciones discriminatorias realizadas".