En tanto, "en esta comunidad siempre hubo ese tipo de violaciones pero como nadie sabía como hacer nada, no se denunciaba por temor a las amenazas".
La comunidad wichí de Alto La Sierra, en Santa Victoria Este, se mostró satisfecha con la decisión de la Justicia de condenar a 8 de los 9 acusados de haber violado a una nena de 12 años el pasado 28 de noviembre.
"Va a haber otro tipo de problemas aquí en Alto La Sierra. Ya hemos aprendido y tenemos que hacer las denuncias", explicó Díaz, dados que las amenazas "siempre fueron por la división histórica entre criollos y wichís".
Ayer se presentó espontáneamente ante el Tribunal, uno de los 9 imputados por la violación que se encontraba prófugo, y que era menor en el momento del hecho.
De los otros 8, seis fueron condenados a 17 años de prisión efectiva, y dos (que también eran menores de edad al momento de los hechos), fueron declarados penalmente responsables por el delito cometido.
Esto último implica que la jueza de Menores, Sandra Mabel Sánchez, deberá determinar la pena a otorgar por el mismo delito, y que según explicaron fuentes judiciales, debería ser no menor a la mitad de la condena dictada a quienes eran adultos al momento del hecho.
Aborto no punible incumplido
Por su parte, el diputado provincial por Rivadavia, Ramón Villa, recordó que cuando realizó la denuncia en una manifestación en la Cámara de Diputados, lo hizo por la inacción de las dependencias del gobierno provincial a las que había puesto en aviso de este hecho en particular en enero de 2016, un poco más de un mes después de ocurrida la violación.
Recordó que pese a que las denuncias estaban realizadas en la Policía de Alto La Sierra, y la nena había sido revisada por el médico de la zona, no se cumplió con los protocolos de aborto no punible (ANP).
El prófugo apareció espontáneamente
La jueza Sánchez, tomó ayer audiencia a la persona que fuera declarada en rebeldía o prófuga por la Sala I del Tribunal de Juicio de Tartagal en el juicio por el abuso sexual de una niña wichí en Alto La Sierra, hecho ocurrido en noviembre de 2015.
Según se informó desde prensa del Poder Judicial el joven J.M.S. se presentó espontáneamente en el juzgado de menores a cargo de las medidas tutelares.
En su relato, el noveno imputado en esta causa dijo que no había comparecido a la audiencia de debate que se llevó adelante en una sola semana, pese a que al principio se preveía que termine el jueves que viene, ya que se encontraba trabajando en tareas de desmonte en la zona de Orán donde había fijado domicilio.
Sostuvo que cuando regresó de las tareas que realizó en el campo fue que su madre le informó del juicio que se llevaba adelante y para el cual se lo había declarado como prófugo.
Hasta aquí J.M.S. había cumplido con las medidas impuestas y concurrió a las audiencias de control de conducta fijadas por la jueza.
El joven, que era menor al momento de los hechos, será juzgado por el mismo delito. Sin embargo, se sostuvo que en este caso en particular se tiene prevista la intervención de otro Tribunal para resolver su responsabilidad o no en los hechos imputados.
