Algunos aliados políticos del Gobierno nicaragüense criticaron el proceso iniciado el día jueves por Luis Almagro para la activación de la Carta Democrática de la OEA en Nicaragua, por un pedido de los EE.UU., la Argentina, Colombia y Perú.
El mecanismo, contemplado en los estatutos del organismo y justificado por el quiebre de la institucionalidad provocada por el Gobierno de Daniel Ortega, podría abrir la puerta a la suspensión del país del organismo.
A través de un comunicado de la cancillería, Venezuela expresó su rechazo a la decisión con nuevos insultos contra el presidente de la OEA: "El impresentable Luis Almagro, evidencia una vez más su servilismo a los intereses de la política exterior estadounidense, así como la obsesiva instrumentalización de la OEA contra legítimos Gobiernos populares".