El superministro del Presidente Jair Bolsonaro, un liberal monetarista graduado en la Universidad de Chicago y que trabajó en Chile durante la dictadura de Augusto Pinochet, defendió la devaluación reciente: "Hasta las empleadas domésticas iban a Disney cuando el dólar estaba a 1,80, eso era una fiesta terrible".
Guedes volvió a ser el centro de las críticas en Brasil por sus dichos al referirse a los gobiernos del PT en el que el real estaba fuerte respecto del dólar.
Las expresiones del ministro brasilero fueron rematadas con la frase "ahora hay que pasear en Foz de Iguazú, ir a las playas del noreste", dijo, desatando la polémica.
"No comento, cada uno responde por sus actos. El dólar está un poco caro", disintió por su parte el propio Bolsonaro al ser consultado sobre las declaraciones de su ministro.
Por su parte el expresidente Lula da Silva fustigó a Guedes a través de Twitter, al sostener "es triste y muchos creen que yo exagero cuando digo esto, pero esta gente no soporta la movilidad social ascendente de los más pobres ni el desarrollo soberano de Brasil". El titular de la ONG Educafro, Frei Davi Santos, afirmó que el ministro cometió "violencia contra los pobres".
Guedes, extitular de un fondo de inversión que se acercó a Bolsonaro en 2017 para presentarle un plan económico, es el ministro más poderoso de Brasil, ya que su cartera se ocupa de inversiones, finanzas, relaciones comerciales internacionales y absorbió el extinto Ministerio de Trabajo.
