Los espectáculos escenificados se enfocan más en el entretenimiento que en las habilidades. Así, en los últimos años, esta competencia se volvió popular entre los lugareños y los turistas. Las mujeres cautivan a las multitudes con sus trajes coloridos y sus travesuras entusiastas.
Por primera vez, un término despectivo para las niñas de herencia indígena o mixta, la palabra "Cholita", llegó a tener connotaciones positivas como un nombre para las mujeres empoderadas, conscientes de la moda, ingeniosas y orgullosas de Bolivia. Las mujeres indígenas aimaras son ahora dueñas de esta palabra y usan vestimenta icónica y el espíritu combativo para superar el racismo y la opresión que las plagó.
Más que entretenimiento y ganancias, es una forma para que las mujeres bolivianas demuestren su valor en un "mundo de hombres", donde las mujeres indígenas pueden mantener la cabeza alta, hacer su trabajo con orgullo y estar en un lugar de igualdad con los hombres.
La mayoría de las "cholitas" provienen de familias con pocos recursos económicos y encuentran aquí una forma de mejorar, en forma independiente, su propia vida y la de sus familias.
Fotos de Izar Raldes
Edición fotográfica de Dante Cosenza