De acuerdo a lo que consigna Veja, en los audios hay frases embarazosas de los ministros de Bolsonaro pero no del presidente, pero no se ha revelado públicamente el contenido de las mismas.
Fallas similares en la seguridad presidencial ocurrieron dos veces bajo el Gobierno de Michel Temer. La primera fue cuando el entonces presidente fue grabado por Marcelo Calero, en el episodio que resultó en el despido de Geddel Vieira Lima; y la segunda, en la famosa charla de Temer con Joesley Batista, responsable del grupo JBS.
Estas filtraciones suceden apenas semanas después de que salieran a la luz unas conversaciones del ex juez Sergio Moro con fiscales del Lava Jato.
El actual ministro de Justicia, que debió comparecer en el Congreso por esta situación, denunció que sufrió un ataque hacker a su teléfono celular y afirmó que no utiliza Telegram -la aplicación desde donde se extrajeron los mensajes- desde 2017.
"Mi opinión, aunque los hechos están siendo investigados, es que existe un grupo criminal detrás de estos ataques.
Después de todo, hay una gran cantidad de personas que sufrieron invasiones o intentos de invasiones, lo que apunta a la posibilidad de que no sea un hacker aislado", resaltó Moro ante los legisladores. El ex juez se defendió al decir que "son normales las relaciones" entre magistrados y partes, sobre todo, según él, en el derecho penal, ya que el juez es responsable de juzgar actos de investigación hasta la condena o la absolución.