El líder de la Iglesia Católica, el Papa Francisco, oficializó la celebración del Vía Crucis de Viernes Santo frente al Coliseo de Roma, se dirigió a una multitud de fieles se ha congregado en Italia para presenciar el Vía Crucis del Viernes Santo y escuchar la oración del papa Francisco, que no ha ocultado su "vergüenza" por las problemáticas sociales que perduran hasta el día de hoy, algunas de ellas protagonizadas por la propia Iglesia católica.
En su homilía el Santo Padre expresó su vergüenza porque muchas personas, incluso algunos ministros de la Iglesia, se hayan dejado engañar por la ambición y la vanagloria, afirmando que perdieron “su dignidad y su primer amor".
"Vergüenza porque muchas personas, incluso algunos ministros (de la Iglesia), se han dejado engañar por la ambición y la vanagloria, perdiendo su dignidad y su primer amor", expresó el pontífice tras leer unos emotivos textos escritos por doce niñas y tres niños de un instituto romano.
Jorge Mario Bergoglio, nombre de pila del Papa Francisco, destacó el arrepentimiento de que sólo Jesús puede salvar del mal y curar a los hombres y mujeres “de la lacra del odio, del egoísmo, la soberbia, la avidez, la venganza, la codicia y la idolatría".
Por otra parte, conforme a la agencia France Press, una familia siria fue elegida para cargar la cruz, anunció el Vaticano. Una pareja de sirios y sus tres hijos cargará la cruz en una de las 14 estaciones; la cruz también fue cargada por monjas dominicanas de Irak.
El más reciente escándalo en que se ha visto envuelta la Iglesia católica se desarrolló a finales de febrero, con la divulgación de un polémico dosier que puso al descubierto las presuntas prácticas sexuales de miembros del clero católico de diócesis de toda Italia. Dicho documento describe pagos a prostitutos, 'chats' gays y orgías que supuestamente involucran a eclesiásticos.