El camión, de origen boliviano al igual que su conductor, comenzó a ser revisado ayer a la mañana para habilitar su paso, sin embargo, cuando los inspectores de Aduanas pasaron el cargamento por el scanner se percataron de ciertas manchas irregulares.
Ante este registro sospechoso, Aduana dio intervención a la Sede Fiscal Federal de Tartagal, a cargo del fiscal, Marcos Romero, quien ordenó que se siga adelante con las tareas de revisación a fin de verificar o descartar las sospechas. Fue así como, los inspectores realizaron hoyos en el techo del acoplado y detectaron sustancia blanquecina, la que al ser cotejada resultó ser cocaína. Ante ello, se profundizó la requisa, la que se extendió por varias horas.
Como resultado de ello, se secuestraron 202 paquetes de droga, lo que hizo un total de 207 kilos de cocaína, la que fue secuestrada.
La AFIP estuvo a cargo del procedimiento, bajo la supervisión del fiscal Romero, quien dispuso calificar el hecho como contrabando agravado de estupefacientes, cuya escala penal asciende a los 15 años de prisión.
Dentro del acoplado, según lo informado, iban 1.000 cajas de bananas. El operativo contó con la participación de los perros antinarcóticos y sus guías. De acuerdo a lo informado, la mercadería tenía como destino el Mercado Central, en la provincia de Buenos Aires y era para consumo dentro del país.
Hasta anoche, personal de Aduana seguía con las actuaciones del caso, en tanto, el conductor del camión quedó detenido e incomunicado a disposición del fiscal.