HAY OTROS GENDARMES INVOLUCRADOS

Procesan al gendarme que extraía droga de depósitos judiciales de Orán

Mario Amilcar Valenzuela, quedó procesado por transporte de estupefacientes agravado, más robo agravado en concurso real con un embargo de un millón de pesos, tras quedar detenido con dos mochilas en las que llevaba droga.

En un control realizado en Hipólito Yrigoyen se detectó la carga de droga y el modus operandi que realizaba el gendarme desde el depósito judicial de
En un control realizado en Hipólito Yrigoyen se detectó la carga de droga y el modus operandi que realizaba el gendarme desde el depósito judicial de

Valenzuela, quedó procesado por transporte de estupefacientes agravado más robo agravado en concurso real con un embargo de un millón de pesos, tras quedar detenido con dos mochilas en las que llevaba droga. El estupefaciente, según trascendidos de su declaración, habría sido robado de uno de los depósitos judiciales de Orán.

En los últimos tiempos se finalizó con un control llevado adelante por el juez Gustavo Montoya, en tres depósitos pertenecientes al Juzgado Federal de Orán, donde se advirtieron algunas irregularidades como diferentes colores en paquetes de droga, en otro de los casos sustancia de baja pureza, y en otro alguna diferencia en el peso, todo esto comparado con las actas elaboradas al momento de los allanamientos. Esto porque desde la Corte de Justicia de la Nación se solicitó ese recuento.

Otro involucrado

Y ahora se procesa a Valenzuela quien al momento de declarar habría señalado que no es el único gendarme que “retiraba” droga para venderla nuevamente. En ese sentido cabe recordar que otro gendarme Nelson Froilán “Cabezón” Flores entregaba hojas de coca para una organización, desbaratada cuando se produjeron los allanamientos en el Correo de Orán, habiendo confesado que se robaba del Escuadrón 20 o las “guardaba” de los allanamientos, en su propia casa.

Valenzuela el 14 de diciembre fue requisado por la Policía Federal que en un control en Hipólito Yrigoyen detuvo al cabo de Gendarmería, quien circulaba en un Fox, junto a un pequeño de 3 años, y a su pareja. 

Al momento de ser detenido y en la declaración de imputación, deslindó a la mujer del delito.

Allí se le secuestraron dos mochilas, una caja de cartón y una cartera en la que llevaba 37 ladrillos de cocaína, que arrojaron un peso de 36 kilos con 494 gramos.  El ex gendarme, de origen correntino se desempeñaba como custodio en el Juzgado Federal de Orán, y dependía del Escuadrón 20.

La cocaína que llevaba había desaparecido del depósito judicial, y según publicaron algunos medios de la ciudad de San Ramón de la Nueva Orán, se trataba de droga secuestrada en 2011.

Últimas condenas por microtráfico

Al cierre de las actividades judiciales previo a la feria de enero, se dictaron tres condenas relacionadas al microtráfico.
El juez Guillermo Pereyra, vocal de la Sala VI del Tribunal de Juicio, condenó a Silvia Graciela Gramajo a la pena de cuatro años de prisión efectiva y multa por resultar autora penalmente responsable del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización.

El juez ordenó que la imputada continúe privada de su libertad con la modalidad de prisión domiciliaria. En el mismo fallo resultó condenada C. P. G. a la pena de dos años de prisión efectiva y multa como autora penalmente responsable del delito de tenencia simple de estupefacientes. 

El juez revocó la condicionalidad de una condena anterior de tres años de prisión condicional dictada contra la imputada por el Juzgado de Garantías 8 y difirió la unificación de penas hasta tanto se cuente con los antecedentes correspondientes.

En el fallo también fue condenado F. G. F. a la pena de un año y tres meses de prisión de ejecución condicional y multa, por resultar autora penalmente responsable del delito de tenencia simple de estupefacientes.

Reglas de conducta

En su caso, se le fijaron las siguientes reglas de conducta: establecer residencia, notificar cualquier cambio al tribunal y someterse al cuidado del Programa de inserción social y supervisión de presos y liberados de Salta; abstenerse de abusar de bebidas alcohólicas y de usar estupefacientes; inscribirse en el periodo lectivo 2019 para terminar sus estudios secundarios; adoptar oficio, arte, industria o profesión acorde a sus capacidades. Todo ello durante dos años.

El juez también ordenó que, mientras dure su privación de libertad, se le brinde a la condenada Carina Patricia Gramajo atención psiquiátrica, psicológica y terapéutica por sus adicciones, previo diagnóstico de un profesional.

Vendía droga en Bº Santa Ana 

En el caso de Silvia Graciela Gramajo fue condenada por comercializar sustancias estupefacientes en barrio Santa Ana, ubicado en la zona sur de la ciudad de Salta.

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