Desde el año 2018, la empresa de Transporte Urkupiña de Tartagal, propiedad de Rubén Severich, está siendo investigada por falsificación de documentos públicos y defraudación al Estado nacional con subsidios del transporte. De esta manera, y según publica el sitio de noticias “Infointerior”, la denuncia fue realizada por uno de los directores de la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMT) al percibir una serie de irregularidades.
En ese entonces, la empresa presentó una declaración jurada donde no se dejaba constancia de dos líneas de recorridos por los que la empresa cobró subsidios liquidados hasta fines de 2018 por el Ministerio de Transporte de la Nación.
Se calcula una presunta defraudación al Estado nacional que superaría los $20 millones.
Las líneas interurbanas en cuestión son las que cubrían los recorridos de Tartagal- Salvador Mazza; Salvador Mazza-Tartagal-General Mosconi; y Orán-La Ramadita, es decir el norte provincial de las cuales en solo una la empresa acreditó una efectiva prestación de los servicios.
Mientras avanza la investigación, el propietario de la firma de colectivos, Rubén Severich, fue citado a declaración para la jornada de hoy 9 de febrero por el Juzgado Federal de Tartagal.
