"Posteriormente, en la segunda semana de la cuarentena, se advirtió una disminución, aunque no fue notoria, pues la atención de consultas por las distintas fuerzas fueron constantes", explicó Facundo Mirabella, auxiliar fiscal.
En los casos primarios, el protocolo a seguir consistía en el traslado al domicilio de los infractores, donde la fuerza actuante llevaba adelante la notificación e intimación, con el correspondiente labrado de actas, las que quedaban como antecedente.
En la segunda semana, en tanto, comenzaron a surgir las consultas por reincidencia. "La policía de la provincia, por ejemplo, opera con un sistema informático propio, en el que cargaban todas las actuaciones primarias. Esto, en el caso de reincidencias, les permitió detectar rápidamente a los infractores por segunda vez, información que aparecía como código rojo", explicó Mirabella.
Las otras fuerzas, Gendarmería Nacional, Policía Aeroportuaria y Policía Federal, en tanto, lo hacía en el sistema informático que poseen a nivel nacional (SIFCOP), donde también se almacenan las actuaciones, pero en un circuito más amplio.
"Por reincidencias se formaron un total de 37 causas penales a personas que ya habían sido intimadas, ya sea por la violación propia del aislamiento o bien por resistencia a la autoridad, por ejemplo, en los controles de vehículos", agregó.
En dos casos, registrados en la capital salteña, se procedió al secuestro de un vehículo y una motocicleta. Asimismo, en muchos casos se llevaron adelante la incautación de teléfonos celulares, una medida que tuvo mucho efecto, en especial en la población más joven.
Casos insólitos
En cuanto a casos atípicos, Mirabella informó que hubo varias intervenciones, entre ellas destacó el caso de un ciudadano que violó la cuarentena al salir con su vehículo para abastecerse de estupefacientes, siendo detenido junto al vendedor, circunstancias en que se iniciaron actuaciones penales, tanto por delitos ligados a la Ley 23.737 como por violar la cuarentena obligatoria.
En la ciudad de General Güemes, ubicada 58 kilómetros de Salta, se detectó a dos personas que se dirigían en un vehículo en dirección al Complejo Penitenciario Federal III Noa para dejar alimentos a un interno, pero solo uno de ellos estaba autorizado, por lo que se procedió a labrar la actuación penal al infractor.
Lo mismo sucedió con un camionero, procedente de Bolivia, quien se dirigía a Buenos Aires, pero acompañado de una mujer. El conductor le había dado un permiso a su acompañante para justificar su compañía, lo cual, obviamente, era irregular y por ende se procedió a la infracción del caso.
Algo similar sucedió con un empleado de un correo privado, quien se dirigía a la provincia de Tucumán con una carga de muestras de COVID-19, las que debían luego ser remitidas a Buenos Aires. En este caso, el empleado iba acompañado de su pareja, lo que no está permitido, por lo que se tomó intervención.
Mirabella destacó como otra de las labores importantes durante el primer turno, las tareas que se llevaron adelante con los trabajadores mineros, los que debieron ser trasladados a sus respectivas viviendas con los controles sanitarios del caso, lo que significó un gran esfuerzo de coordinación con las distintas fuerzas, incluso hasta el Ejército que ayudó dado a los aludes que, por las intensas lluvias, impidieron por momentos el transporte de cientos de obreros mineros.
Por último, el funcionario judicial destacó también la enorme labor desarrollada por las distintas fuerzas de seguridad que trabajan en el control de la cuarentena obligatoria.
