El 6 de mayo de 2017, la madre de Paola Mariana Álvarez denunció la desaparición de su hija, quien aparentemente mantenía una relación sentimental con Santiago Alfredo Zambrani. La víctima había estado la noche anterior con el imputado. Tres meses después, su cuerpo fue hallado en el camino de cornisa de la ruta nacional 9, kilómetro 1640.
El lunes pasado declararon los últimos testigos citados por las partes. El médico médico legal del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) que realizó la autopsia del cuerpo de la joven explicó que no presentaba heridas penetrantes, golpes ni fracturas pero que ante el avanzado estado de descomposición no se pudo determinar la causa de muerte.
Indicó que por las características geográficas y climáticas del lugar del hallazgo, el cuerpo estaba bien conservado en las partes que tenían prendas de vestir y desestimó que la joven haya fallecido por una caída desde altura o que el deceso se haya producido por el consumo de somníferos, puesto que debiera haber ingerido una cantidad elevada para lograr la muerte.
A su turno del bioquímico toxicólogo del CIF dijo que en el cuerpo de la víctima no se pudo detectar la presencia de drogas o plaguicidas debido al paso del tiempo y la descomposición.
En el análisis de botellas secuestradas de la casa del principal acusado, se detectó cocaína en dos botellas de cerveza y explicó los efectos de esta combinación.
También declararon una licenciada en Criminalística que realizó la inspección ocular de las prendas de vestir de la víctima, una efectivo policial licenciada en Letras y realizó un análisis del discurso sobre las búsquedas que realizó Santiago Zambrani en Internet, y una psicóloga realizó un informe victimológico de Paola Álvarez y un informe integral sobre el principal imputado usando la técnica del perfilamiento.
Amelia Huergo, una de las imputadas y madre del acusado hizo un breve relato ante el Tribunal y luego manifestó no encontrarse en condiciones de continuar por lo que se lo dio por finalizado.
La madre de Zambrani intentó detallar sus actividades desde el día 5 de mayo hasta su detención y admitió que le prestó la camioneta a su hijo la tarde del 5 de mayo y que el sábado 6 la buscó personalmente del barrio Autódromo, acompañada por su esposo.
Cabe señalar que la acusada en declaraciones anteriores negó haberle facilitado la camioneta a Santiago, lo que quedó desestimado cuando se exhibieron las imágenes de las cámaras de seguridad del Sistema de Emergencias 911.
El tribunal colegiado está conformado por los jueces de la Sala IV, Mónica Mukdsi, Roberto Lezcano y Norma Vera. Por el Ministerio Público los fiscales Ramiro Ramos Ossorio y Pablo Paz.
