Con respecto al comisario Víctor Hugo Bocos, otro de los implicados, el fiscal pidió que sea examinado por una junta médica local.
Amad señaló que en los últimos días se cumplieron los actos procesales que faltaban respecto a la causa penal conocida como "La Veloz del Norte", iniciada tras denuncias de secuestro y tortura de 17 ex trabajadores de esa empresa de transporte por hechos ocurridos entre enero y febrero de 1977 en Salta.
Al iniciar la investigación del caso, la Justicia federal de Salta admitió avanzar contra el empresario y otros policías respecto a las torturas de las que fue víctima el delegado gremial de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) Víctor Cobos, en el marco de maniobras destinadas a disciplinar a los empleados.
Diferente fue la postura respecto al secuestro y torturas que sufrieron los otros trabajadores. Frente a ello había recurrido la fiscalía interviniente, a lo que siguió una sucesión de planteos recursivos hasta arribar a una resolución de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. El 18 de diciembre de 2018, el Máximo Tribunal ordenó que el caso sea retomado por el juez Bavio.
Las indagatorias se concretaron entre el miércoles y jueves pasado, circunstancias en que todos los acusados se abstuvieron de prestar declaración indagatoria, con excepción de Bocos, quien no se presentó y alegó razones de salud.
Por aplicación de las garantías de plazo razonable y tutela judicial efectiva, Amad instó al juez a resolver sin más trámite el procesamiento de los imputados, como así también que sean sometidos a juicio oral.
Para Amad, los 17 trabajadores fueron perseguidos, detenidos y torturados en la Comisaría 4 a instancia de los directivos de la empresa. Y lo fue por su actividad gremial contraria a los intereses de Levín.
Agregó que ya se realizaron varias medidas probatorias, las que, a su criterio, ratificaron los hechos de privación de la libertad y torturas sufridas por las víctimas, como así también la participación de Levín, Grueso, Almirón, Bocos y Cardozo.
