Como se recordará a principios de mes el sacerdote que dictaba una cátedra y cumplía otras funciones dentro de la universidad con anuencia o acuerdo del arzobispado, fue despedido, de acuerdo a su abogado, Juan Casabella sin motivo justificado.
Esta falta de justificación estaría dada por el hecho, que tras la denuncia presentada es intención de la casa de altos estudios se archiven las supuestas denuncias que por acoso sexual se habían recibido, en virtud que las supuestas víctimas no ampliaron ni asentaron los hechos, que involucraban a Talló en pedido de favores sexuales a cambio de calificaciones en los exámenes, algo que se debe realizar ante la UDIS.
Así trascendió que esa causa fue girada por el fiscal Córdoba Maruzik a la Unidad en contra de Delitos de Integridad Sexual.
Mientras tanto es de suponer que el tema no terminará allí, ya que la semana anterior los asesores legales de la UCASal Ricardo Albornoz y Ricardo Red habrían sido los encargados de que tramitar se archive la causa sobre los supuestos acosos, ante la falta de presentación de las involucradas y de la ampliación de las denuncias.
El cura Talló tiene 23 años de antigüedad dentro de la universidad, y ahora está despedido sin causa justificada, según insiste su representante legal, por lo que se analiza demandas civiles contra la institución.