Con este fallo, el abusador s ólo deberá cumplir ciertas reglas de conductas y someterse a un tratamiento psicológico para controlar sus impulsos sexuales.
Así lo decidió, la jueza María Gabriela González, vocal de la Sala III del Tribunal de Juicio, quien condenó a J. A. M. A. (41) a la pena de tres años de prisión de ejecución condicional por resultar autor material y penalmente responsable del delito de abuso sexual simple agravado por la convivencia.
El imputado, según confirmado, era pareja de la madre de la víctima. Y los hechos habrían ocurrido, cuando la menor iba de visita los fines de semana a la casa de su mamá, donde se encontraba el acusado.
El hombre condenado permanecerá en libertad por la modalidad de la condena dictada, aunque deberá cumplir una serie de reglas de conducta durante tres años para conservar la prisión en suspenso, entre ellas fijar domicilio y comunicar cualquier cambio en un plazo de 24 horas; someterse al Programa de Inserción Social y Supervisión de Presos y Liberados; abstenerse de consumir sustancias estupefacientes y de abusar de bebidas alcohólicas; realizar tratamiento psicológico para el control de sus impulsos sexuales y presentar las constancias correspondientes al inicio y a su evolución.
Finalmente, la jueza ordenó la extracción de material genético del condenado por parte del CIF a fin de sumarlos al Banco de Datos Genéticos provincial.
Robo insólito
Una mujer policía fue víctima de un robo, hecho ocurrido en la playa de estacionamiento de la Unidad Regional, en la ciudad de Orán.
El robo ocurrió en razón de minutos, pues la mujer entró a la base y salió en instantes.
La denunciante indicó que al regresar a su auto, vio una de las puertas del vehículo abierta. Enseguida, constató que le habían sustraído su celular Samsung A30, como así también advirtió que otras pertenencias estaban por el piso.
El hecho, obviamente, llamó la atención, pues se trata de un predio lleno de policías, ahora sospechosos.