Tras la presentación, apertura y notificación formal del Proceso Preventivo de Crisis (PPC) en el Ministerio de Trabajo, los empresarios y gremialistas mantuvieron un encuentro reservado donde deli-nearon un acuerdo "amigable". Luego, los detalles fueron trasladados a funcionarios de Jorge Triaca, quien avalará lo acordado con la homologación del pacto.
El acuerdo incluyó "esfuerzos" compartidos. En principio no serían 2.700 ni 2.500 los puestos de trabajo alcanzados por el ajuste.
En total, a lo largo y ancho del país, se desvinculará a 1.000 personas de Carrefour. Esa es la cifra "real" que exigieron los franceses para balancear los números rojos.
La mayoría se irá con retiros voluntarios de entre 110% y 150%, destinados a los de mayor antigüedad. "Será para los que tienen en promedio más de 15 años, se van a ir con buena plata en el bolsillo", aseguran los gestores del acuerdo. Otro tanto dejará la compañía con jubilaciones anticipadas.
Cerrarán sucursales de locales alquilados
Otro punto de discusión fue el cierre de sucursales. Carrefour posee unos 610 locales en 22 provincias. Al 31 de diciembre de 2016, se contabilizaban 7 maxis, 79 hipermercados, 126 markets y 398 express.
Las únicas bocas de expendio que bajarán sus persianas serán las instaladas en establecimientos que se alquilan, aunque son los menos.
Los europeos ya le avisaron a Mauricio Macri que las nuevas tarifas de servicios públicos hacen casi inviable el negocio.
Para justificarlo, apelan a las millonarias boletas de luz y gas para mantener el aire acondicionado o la calefacción en más de 669.000 metros cuadrados totales que ocupan las tiendas.
En este punto, el Sindicato exigirá la reubicación de empleados sin local y que el "persianazo" no provoque una escalada gremial y social en las localidades del interior, donde trabajadores y clientes comparten la vida cotidiana y lazos familiares.