Gobierno argentino salió a responder a las fuertes acusaciones que la presidenta de Bolivia, Jeanine Áñez, formuló ante la ONU donde denunció el "acoso sistemático y abusivo" del gobierno de Alberto Fernández.
Desde Cancillería, lamentaron las críticas y le dijeron a Áñez que se concentre "en la realización de las elecciones presidenciales libres y transparentes".
"La Cancillería argentina lamenta que en su intervención del día de hoy ante la Asamblea General de la ONU la señora Jeanine Áñez haya insistido en procurar involucrar al gobierno argentino, en plena campaña electoral, en la política interna del Estado Plurinacional de Bolivia", respondió la Cancillería argentina en un breve comunicado difundido por Twitter.
En esa línea, desde el Ministerio de Relaciones Exteriores que encabeza Felipe Solá, agregaron: "Esperamos que la señora Áñez pueda concentrar su energía en la realización de las elecciones presidenciales libres y transparentes del próximo 18 de octubre".
Las acusaciones de Añez
“¿Cuál es la autoridad que tiene para amparar una conspiración violenta de Evo Morales contra la democracia boliviana desde suelo argentino?”, dijo Áñez en su discurso ante la Asamblea General de la ONU el miércoles.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina no respondió de inmediato a un mensaje en busca de comentarios. Morales vive actualmente en Buenos Aires, luego de salir de Bolivia en medio de disturbios masivos, tras una elección disputada el año pasado.
Luis Arce, un candidato cercano a Morales, lidera las encuestas antes de la votación del 18 de octubre. Áñez se retiró de la carrera electoral este mes, después de que las encuestas mostraran que perdió apoyo.
"Argentina es una nación que valoramos y queremos como se quiere a un hermano. No tenemos nada contra el peronismo, que valoramos como una tradición política, la tradición nacional popular, impulsora de enormes logros en la modernización social de Argentina", destacó.
En la misma línea, aseguró que tampoco "tiene encono alguno contra otros Gobiernos como el de La Habana" pese a que no existen coincidencias "ideológicas".
"Sostenemos el debido respeto y la cortesía, que marcan las relaciones entre dos Estados soberanos y entre dos pueblos hermanados por la Historia", sostuvo.
En este sentido, acusó a la Argentina de "entrometerse" en la política boliviana, especialmente al "amparar una conspiración violenta por parte de (el expresidente) Evo Morales contra la democracia boliviana".
Por último, agregó: "Sepa el populismo kirchnerista que la nación boliviana no es propiedad privada de ninguna casta. Somos un pueblo soberano y respetable. Bolivia se respeta. La democracia boliviana se respeta. El pueblo boliviano se respeta".