Así lo confirmó Jorge Knoblovits, presidente de la DAIA, que se encuentra en el país del norte participando de reuniones con las principales organizaciones judías estadounidenses.
Si bien no estará en el acto central -arriba por la tarde-, se espera que Pompeo participe de un seminario sobre terrorismo que se realiza todos los años en coincidencia con el aniversario del atentado.
La llegada de Pompeo no es un gesto menor de la Casa Blanca, que hace una apuesta diplomática al enviar a su secretario de Estado ya que es consecuente con su teoría de que hubo participación de Hezbollah e Irán en el ataque a la AMIA.
Es común que Estados Unidos envíe a Pompeo a los países donde hubo atentados que, según su posición, fueron realizados por organizaciones o países que consideran adversarios.
Esto va en línea con lo que comentó el propio Knoblovits en diálogo con Radio Jai. Según explicó, en todas las reuniones sostenidas con los dirigentes de la comunidad judeo-norteamericana, el tema del atentado terrorista y su impunidad aparece "como tema obligado".
Asimismo, la presencia de Pompeo demuestra el interés de Estados Unidos en denunciar a Irán y Hezbollah por su participación en el ataque a la AMIA y en el de la Embajada de Israel.
También es un nuevo apoyo al gobierno de Mauricio Macri ya que Trump envía a su principal figura en política exterior.
La pelea contra el terrorismo
En lo que hace a la lucha antiterrorista, los estadounidenses y los israelíes vienen insistiendo hace tiempo con el hecho de que Hezbollah tiene alta presencia en la zona de la Triple Frontera. Y vienen pidiéndole a la Argentina que lo declare grupo terrorista. Existen proyectos de ley en ese sentido en el Congreso argentino. También lo promueve el titular de la Unidad de Información Financiera, Mariano Federici.
El objetivo de la cita en Buenos Aires será analizar los avances concretos en esa colaboración, "para evitar la reiteración de la violencia terrorista en el futuro", según indica el comunicado conjunto emitido hacia fines de diciembre del año pasado en Washington.
El texto indica, por ejemplo, que "el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones es una seria amenaza a la paz y la seguridad internacional" y reafirma el compromiso de los países a "luchar contra el terrorismo y priorizar los esfuerzos para derrotar a los grupos terroristas nacionales y transnacionales".