El 23 de diciembre de 2020 se sancionó la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo N°26.170. A un año de aprobarse, los datos oficiales que dio a conocer Télam indican que hubo 32.758 abortos hasta noviembre realizados en el sistema público de salud.
El proyecto Mirar de Cedes e Ibis también, que acompaña a la Red de Socorristas incorporó unas 5.600 interrupciones.
Además el Ministerio de Salud informó que fueron distribuidos hasta el mes pasado 46.283 tratamientos de misoprostol, En 2020, fueron 18.560 en total.
Cabe destacar que el medicamento es recomendado para la práctica segura de interrupción del embarazo.
El informe de Mirar estableció que la tasa del aborto, que mide la cantidad de abortos por 1.000 mujeres y otras personas en edad fértil, muestra la brecha entre jurisdicciones: en Ciudad de Buenos Aires es de 5.6; en Tierra del Fuego, de 4.3; del otro lado, en Chaco alcanza 0.9 y en Formosa, 0.6.
Los resultados muestran una desigualdad en cuanto el acceso a la práctica entre las provincias y la capital de país.
En Salta, el único nosocomio que realiza el procedimiento es el Hospital Materno Infantil, que tiene una taza de 40 asistencias en interrupciones al mes.
La ley prevé que los estados provinciales deben garantizar la ejecución de la legislación en todos los hospitales y centros de salud públicos de la provincia. Algo que no se ha podido concretar en la realidad salteña.