Croacia es finalista de Rusia 2018 y por primera vez tendrá la oportunidad de quedarse con la Copa del Mundo. Pero, a pesar de lo que "los manuales indican", el equipo europeo tuvo unos meses y días agitados antes del Mundial.
Para empezar, su clasificación a Rusia 2018 fue casi milagrosa. Por malos resultados, la Federación decidió echar al técnico y contrató de forma interina a Zlatko Dalic.
Dalic comandó a Croacia para ganarle a Ucrania en la última fecha de las eliminatorias y así clasificar milagrosamente al repechaje. Ahí superó a Grecia y entró al Mundial "por la ventaja". Ya en el sorteo, cuando le tocó el grupo de Argentina pensaron que la tenía difícil.
Y sobre todo porque antes del Mundial sufrió dos golpes muy duros en derrotas ante Brasil y Perú, con "baile" incluido. Así llegó Croacia a Rusia 2018.
Luego del debut ante Nigeria (2-0), el plantel croata vivió un primer escándalo en el Mundial. Nikola Kalinic se había negado a ingresar en el partido contra los africanos y por eso fue expulsado por el técnico. Croacia disputó todo el Mundial con 22 jugadores.
A partir de eso todo fue positivo para Croacia que le ganó a Argentina, Islandia y superó a Dinamarca y Rusia por penales.
Eso sí, tras eliminar al local, otra vez el escándalo. Ognjen Vukojevic, parte del cuerpo técnico, fue echado de su cargo tras la difusión de un video con un polémico festejo por el triunfo ante Rusia.
Así las cosas, en el peor ambiente posible, Croacia consiguió la victoria más importante de su historia al ganarle 2 a 1 a Inglaterra y clasificar por primera vez a la final de un Mundial.
