Leonardo Mercado, director del Museo de Antropología de Salta, indicó a Nuevo Diario que el material se halló e manera fortuita, al igual que otro descubrimiento anterior que hubo en la localidad de El Tala y que pertenecía a la cultura La Candelaria.
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Una pobladora se encontraba caminando por una zona arqueológica cuando logró divisar la boca de una urna. “Seclantás tiene un protocolo de acción para el caso de hallazgos fortuitos, reglamentado a nivel municipal, una herramienta muy interesante que funciona a la perfección”, comentó.
La mujer se dirigió a la Municipalidad de Seclantás y realizó la correspondiente denuncia del hallazgo. Un equipo del dl Museo de Antropología concurrió a la zona, para entrevistar a la vecina y funcionarios de la intendencia.
“Sugerimos a la Municipalidad tomar una serie de medidas preventivas de resguardo del material y luego comenzamos las tareas de excavación y rescate. Pudimos recuperar una urna de la cultura santamariana, que tuvo un desarrollo en el Valle Calchaquí entre el año 900 y 1.400 de la era cristiana”, explicó.
Mercado señaló que la urna está fracturada, con posibilidad de reconstrucción y muy poco material asociado. En los alrededores había mínimos restos óseos que ahora se están analizando.
“El material lo trasladamos hasta el área de reserva de Seclantás, inventariado para que quede a disposición para futuras investigaciones”, expresó Mercado.
En este rescate trabajaron el Museo de Antropología de Salta (MAS) y la Subsecretaría de Patrimonio Cultural. En estos casos las tareas se realizan junto a municipios de toda la provincia y con el apoyo de dependencias de las Fuerzas de Seguridad como la División de la Policía Rural, Ambiental y de Bienes Culturales.
