En la madrugada de ayer, un llamado telefónico alertaba al Sistema de Emergencias 911 sobre el hallazgo del cuerpo sin vida de un hombre en el sector denominado Colonia G de una finca perteneciente a una conocida empresa en El Tabacal.
Efectivos policiales se dirigieron al lugar donde corroboraron la versión, constatando el médico legal que el cuerpo de la víctima presentaba signos de quemadura, por lo que se dio intervención a la Fiscalía Penal de turno.
Las primeras diligencias policiales permitieron establecer que la víctima se trataba de Esteban Oscar Colque de 41 años, quien se desempeñaba como sereno en el lugar, y que los indicios hallados en el lugar permitirían señalar que se trataría de una muerte accidental.
Sin embargo, un grupo especializado en investigación trabaja intensamente a fin de lograr el total esclarecimiento del suceso, en tanto se aguarda el informe de la autopsia del cuerpo de la víctima.
De acuerdo a lo que observaron los primeros efectivos en arribar al lugar tras recibir la denuncia de personas que transitaban por el lugar, pertenecientes a una aseguradora, el sereno había prendido una fogata, seguramente para mitigar las bajas temperaturas.
También se observaba que había armado dos especies de bancos con piedras y una madera.
Ninguna hipótesis se deja de lado, aseguraron los investigadores, que buscan establecer, si estuvo con alguna compañía en sus últimas horas, o en su defecto si sufrió un desmayo estando solo, que lo podría haber causado.
Cuando resta conocer detalles sobre los hechos que terminaron con un detenido por la muerte de un “bagayero” en el norte provincial, sorprende que otra muerte se haya producido con características similares.
De tal palo tal astilla
Dos mujeres que resultaron ser madre e hija quedaron detenidas tras ser denunciadas por una víctima a la que le arrebataron el celular.
En horas de la noche del martes, una joven que se encontraba en la parada del colectivo interurbano ubicado en avenida San Martín, alertó a una patrulla policial sobre el robo de un celular.
De inmediato los policías realizaron las primeras diligencias, determinando que el ilícito fue advertido a través de las cámaras del Centro de Video Vigilancia, por lo que lograron identificar a los autores del hecho.
Esto permitió a la patrulla policial ubicar y demorar a dos mujeres, madre e hijas, individualizadas como las responsables logrando el secuestro del celular robado, por lo que ambas fueron trasladadas a la dependencia policial y puestas a disposición de la justicia.
Se investiga si las mujeres tenían antecedentes de punguistas o arrebatos en la vía pública.
