La mujer se dirigía a su casa cuando fue interceptada en un auto negro por dos hombres, quienes la obligaron a bajar del suyo, golpearon su rostro, le fracturaron una costilla y la amenazaron con una frase que estremece: "Si seguís jodiendo en esa escuela te voy a arrancar las víceras", le dijo uno de los agresores.
Desde el entorno de la maestra y una gran parte de la comunidad educativa sospechan que el padre de uno de sus alumnos estuvo detrás del ataque, ya que el viernes anterior había amenazado a la mujer en medio de una discusión en la escuela y delante de la vicedirectora. Ese día, luego de retirar a su hijo, vio una nota en el cuaderno de comunicaciones que decía que el chico había contestado mal, y como no le gustó, volvió y la increpó violentamente. Cintia fue el lunes siguiente a la Justicia y denunció al hombre. Dos días después la atacaron.
El caso conmocionó a toda la ciudad y fueron varios los padres que protestaron frente al colegio. Fue tal el impacto que incluso las autoridades provinciales intervinieron en el caso, concurrieron a la escuela y citaron al papá acusado, quien negó su participación en el hecho.
En la declaración ante la Policía tras ser atacada, Cintia no logró identificar a los agresores aunque sí aclaró que no le robaron nada, lo que descartaría que se trató de un hecho de inseguridad.
Tres días después de lo ocurrido, Sampedro finalmente rompió el silencio y mientras aún se recupera de los golpes, brindó una entrevista a Infobae en la que dio su versión de lo ocurrido y reveló que en las últimas 72 horas, la volvieron a amenazar. Sólo que esta vez, fue a través de Facebook. "No paro de recibir mensajes de esta gente. Estuve en la comisaría mostrando los mensajes que la mamá (del nene) me manda", aseguró.