“Esperamos el agua en nuestras casas durante más de 40 años”, dijeron emocionadas algunas familias, dijeron a Nuevo Diario algunos de los vecinos.
Muchos de ellos durante el verano pasado, protagonizaron protestas, y dirimiendo sus días y los de las familias de la zona, sumidos en la impotencia ante la falta del líquido, o bien la pésima calidad o escasa cantidad que llegaba.
"Esperamos tanto este momento, que todavía nos permitimos tener nuestras dudas sobre cómo será este servicio, fundamentalmente en cuanto a la cantidad y la presión del agua”, analizó uno de los vecinos, quien advirtió también que “veremos el resultado final de esta obra durante los meses de verano”, y recordó la temporada estival pasada, en donde ni siquiera el plan de contigencia municipal, ni los camiones cisterna, eran suficientes para abastecer a las casi 900 familias establecidad a lo largo de Floresta.
“Estamos muy ilusionados con que finalmente esta obra nos de respuesta a una demanda por el agua, de más de 40 años, y lo único que esperamos es que todos podamos acceder a este servicio que es un derecho”, finalizó el vecino.
La obra se lleva adelante con una inversión del Gobierno de la Provincia de más de 41 millones de pesos, y está a cargo de Aguas del Norte.