La iniciativa legislativa es de autoría del senador Carlos Rosso (Güemes-PJ) y tras el acompañamiento de sus pares de la Cámara alta, el proyecto pasará a la Cámara de Diputados para su sanción definitiva. La propuesta de conformar estos centros estudiantiles, surge conforme a la Ley de Educación de la Provincia N° 7.546 y la Ley Nacional N° 26.206, que garantizan y promueven la creación de organismos de representación estudiantil.
Rosso dijo que es un proyecto que se trabajó en conjunto con la Subsecretaría de la Juventud de la Provincia, ya que hay una ley nacional que no solo requiere de su adhesión en la Provincia, sino que cada provincia debe adecuarla de acuerdo a su región y su geografía. “Con esta ley le daremos el derecho a los jóvenes de tener representantes y marcar sus obligaciones en los colegios en la Provincia. Hoy están trabajando muchos chicos y esto es un aliciente por su compromiso hacia adentro de la institución como un compromiso social y con el cartel del nombre del colegio”.
“Se les da la posibilidad a los estudiantes desde la institución educativa a sentir lo que es la representación y responsabilidad. Y el deseo que tenemos como Cámara de Senadores es poder tener sentados a jóvenes que ya representaron a sus pares y compañeros”.
El legislador destacó que una vez promulgada la ley será el ministerio de Educación en conjunto con la subsecretaria de la Juventud que acompañen el trabajo de los jóvenes.
Detalles del proyecto
En los articulados se destaca el rol del centro de estudiantes, su aporte a la institución democrática, representativa de los estudiantes de un mismo establecimiento escolar, que aporta a la construcción ciudadana mediante el fortalecimiento del respeto al pluralismo, la empatía, el ejercicio de derechos y cumplimiento de obligaciones en la convivencia democrática de la vida estudiantil.
Entre los propósitos a cumplir por cada centro estudiantil sobresalen, entre otros, los siguientes: actuar como intérprete y ejecutor de la voluntad de los estudiantes del establecimiento Defender y asegurar el cumplimiento de los derechos estudiantiles.
Participar de posibles soluciones alternativas a problemáticas estudiantiles que se generan. Contribuir en la cultura política pluralista con la búsqueda de consensos luego de debates con participación y espíritu crítico.
Fomentar la participación del estudiantado en temas de su interés. Incentivar en los estudiantes la responsabilidad y capacidad de adoptar formas de representación.
Presentar propuestas sobre el mejor funcionamiento de una convivencia armónica en el establecimiento al cual pertenece.