También reiteraron su exigencia de que la humanidad asuma una visión armónica con la naturaleza.
“El Congreso todos los años saca un documento, tiene un nombre igual, se llama Documento Tierra, es un tratado interétnico para la refundación de la Nación Argentina. Se manda a los políticos, al Congreso de la Nación, para ver si en algún momento se consigue una República Plurinacional como es en Bolivia”, informó a Nuevo Diario el médico Rodolfo Franco, quien está casado con una integrante de la Comunidad de Misión Chaqueña y reside en esa localidad.
Añadió que el documento también conlleva un reclamo de respetar más el medio ambiente, la tierra; morigerar la siembra de la soja, limitar el uso de los agrotóxicos, controlar la explotación minera y “empezar a vivir más de acuerdo con la naturaleza”.
El Documento levanta en ese sentido esta reivindicación que atraviesa a todos los pueblos originarios asentados en lo que hoy es el territorio nacional argentino. “Que se respete más la naturales, el modo de vida más tradicional, no tanta contaminación y tanta pobreza para la gente originaria”.
Dentro del gran tema del territorio, la tierra, que comprende a las otras preocupaciones de los habitantes originarios, los representantes de las distintas comunidades participantes hicieron oir su diagnóstico de las muchas necesidades que sufren.
Sin embargo, todas coincidieron en lo central: el planteo de “que se pueda vivir más en armonía con la naturaleza”.
Este Congreso tuvo la particularidad que asistieron también representantes de comunidades no wichi. Por un lado fue una delegación, encabezada por el cacique Omar Situe, de la Comunidad Guaraní Happo P+au, de Embarcación.
Por el otro, participó un representante del pueblo ranquel, que viajó desde Córdoba, donde reside, y que tenía interés en conocer esa experiencia del pueblo wichi ubicado en el territorio de la provincia de Salta.
Franco consideró “importante que se traten estos temas, porque sería una nueva forma de vivir y de ver las cosas”. Recogió en este sentido una premisa de la cosmovisión indígena, expuesta en el documento: “La tierra no nos pertenece, sino que nosotros pertenecemos a la tierra”.