Paola Amado una de los estudiantes de nivel terciario contó a Nuevo Diario, que los niños de esa escuela pertenecen a un asentamiento cercano y de familias de obreros de ladrillerías. Son personas de escasos recursos económicos y eso se aprecia en la pobre vestimenta de los alumnos y en las cada vez más acuciantes necesidades a la hora de alimentarse.
En la escuela se sirve el desayuno y el almuerzo y, "cuando se puede", postre. Paola contó que los fondos que recibe la dirección de la escuela no siempre alcanzan para servir postre, y además los chicos piden comida para llevar a los hermanos que no van a clases.
Junto a otros tres compañeros, Paola llegó a esa escuela para una práctica y se conmovió con la realidad de los chicos. Por eso comenzaron una campaña para colectar vestimenta, calzados y alimentos. Ya consiguieron buena cantidad de ropa, pero todavía están flojos de mercadería: ne-cesitan yerba, té, arroz, fideos, sémola, maíz pe-lado, lenteja o "lo que us-tedes puedan". También necesitan zapatillas o zapatos de tallas 24 al 41. Quien desee hacer un aporte puede comunicarse con el teléfono móvil 3878614295.
Todo lo reunido será llevado a la escuela el próximo martes, en el último día de práctica de los cuatro estudiantes. Sin embargo, Paola indicó que es su intención continuar periódicamente con esta colecta, para seguir asistiendo y paliando en algo las necesidades.