Una multitud de más de 22.000 personas estaba escuchando a la estrella de música country Jason Aldean en el marco del "Route 91 Harvest Festival", cuando alrededor de las 10H08 locales (05H08 GMT del lunes) se desató una lluvia de disparos de arma de fuego automática.
La policía afirma que un solo hombre abrió fuego contra los asistentes desde su habitación en el piso 32 del hotel casino Mandalay Bay, ubicado al otro lado de la calle sobre la famosa Las Vegas Strip.
Robert Hayes, un bombero de Los Ángeles que estaba en el concierto, declaró a Fox News que lo que sucedió se parecía a una "escena de guerra". "Era como si estuvieran disparando a pecesitos de colores", dijo.
La policía dijo que al menos 58 personas habían muerto y 515 resultado heridas. Las autoridades hicieron también un llamado a donar sangre.
El autor de los disparos
Las autoridades identificaron al autor de los disparos como Stephen Craig Paddock, un hombre blanco de 64 años de Mesquite, Nevada, unos 130 kilómetros al noreste de Las Vegas. Paddock es el único sospechoso de haber abierto fuego, según las autoridades. Fue encontrado muerto en su habitación del hotel cuando un equipo de intervenciones especiales (SWAT) irrumpió en el lugar. La policía cree que Paddock se suicidó.
Las fuerzas de seguridad encontraron al menos ocho armas de fuego, incluidos varios rifles, en la habitación de hotel. Hasta el momento se sabe muy poco de Paddock, quien no parece tener antecedentes penales.
El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó el hecho, asegurando que el atacante se había "convertido al islam hace algunos meses", pero las autoridades estadounidenses dijeron que "por el momento" no encontraban lazos de lo ocurrido con ningún "grupo terrorista internacional".
El presidente estadounidense, Donald Trump, calificó el tiroteo como un "acto de pura maldad" y dijo que visitará Las Vegas el miércoles. El papa Francisco declaró que estaba "muy triste" por la "insensata tragedia".
El tiroteo más letal
Aunque el saldo final aún está por confirmarse, el tiroteo de Las Vegas ya es el más letal ocurrido en la historia reciente de Estados Unidos. El más mortífero hasta ahora databa de junio 2016, cuando 49 personas murieron en la discoteca Pulse en Orlando, Florida. Un estudiante mató a 32 personas en 2007 en la universidad Virginia Tech y luego se suicidó.
