OCURRIDO EN 1973

Piden que se reabra la investigación por el homicidio de Rubén Fortuny

El fiscal federal Eduardo Villalba solicitó la reapertura de la investigación del homicidio del ex jefe de la Policía de Salta, Rubén Fortuny, quien fuera asesinado el 27 de noviembre de 1973, frente a la plaza 9 de Julio, a la vista de todos. Según trascendió, el fiscal calificó el hecho como una violación a los derechos humanos. 

Trascendió que el Fiscal federal Eduardo Villalba calificó a este homicidio como una violación a los derechos humanos. 
Trascendió que el Fiscal federal Eduardo Villalba calificó a este homicidio como una violación a los derechos humanos. 

El dictamen del fiscal, emitido hace unas dos semanas, recayó en el Juzgado Federal N° 2, a cargo del juez Miguel Medina, quien tiene que resolver cómo se tratará este hecho. 

Requerimiento en 2011

La reapertura de la investigación del asesinato de Fortuny, a manos del ex policía y ex legislador Emilio Pavicevich, comenzó a ser formalmente planteada en agosto de 2011, en el primer juicio por la desaparición del ex gobernador Miguel Ragone.

En los alegatos, el entonces querellante por la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, Martín Ávila, pidió que el asesinato del ex jefe de Policía fuera declarado un delito de lesa humanidad. 

Violación de DD. HH.

Desde la Fiscalía se explicó a Nuevo Diario que el dictamen del fiscal  Villalba no considera a este homicidio como un delito de lesa humanidad, porque se cometió durante gobiernos constitucionales democráticos (Juan Domingo Perón en la Nación y Miguel Ragone en Salta).

Pero el fiscal sí entendió que hubo una violación de derechos humanos porque "ya había bandas parapoliciales que estaban operativas" en la provincia, se indicó. 

Fortuny fue asesinado dos días después que renunciara a su cargo en la Jefatura de la Policía (en la que había asumido el 25 de mayo de 1973, el mismo día en que Ragone asumió en la gobernación). 

Sospecha de venganza

El entonces jefe de la Policía de la Provincia en la década del ‘70 impulsó un cambio en la fuerza policial: promovió la investigación criminal, dio de baja a los policías implicados en apremios ilegales y torturas.

Precisamente, se sospecha que el ex jefe fue víctima de una venganza de este último sector, donde ocupaban cargos de relevancia reconocidos comisarios, como el represor ahora convicto Joaquín Guil, que tras las zozobras durante esta gestión iban a ser impuestos nuevamente a Ragone, mediante la presión del propio Ejército, y luego iban a destacarse como actores del terrorismo de Estado, e incluso varios de ellos fueron luego sospechados de haber participado del secuestro y desaparición del propio Ragone. 

Ávila recordó en su alegato que el intento de depuración de la Policía salteña, que era consecuente con la política que a nivel nacional impulsaba el ministro del Interior Esteban Righi, fue "una de las medidas más revolucionarias del gobierno de Ragone" y le generaron un "odio político". 

Connivencia judicial y policial

También en los alegatos señalados, el ex representante por la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación criticó "la miserabilidad de la Justicia salteña" que en su momento calificó al hecho como un homicidio preterintencional y le impuso una pena mínima al asesino, a quien además la Policía permitió escapar tras haber perpetrado el asesinato.

Compartí esta noticia!

VER MÁS

Deportes


VER MÁS

Salta


VER MÁS

El País


VER MÁS

Judiciales


VER MÁS

Provinciales


VER MÁS

Te puede interesar


VER MÁS

Cultura y Espectáculos


VER MÁS

Política


VER MÁS

Seguridad


VER MÁS

Mundo


VER MÁS

Economía


VER MÁS

Tendencias


Más de Judiciales

ÚLTIMAS NOTICIAS