En ese marco quedó alojada en el hogar Gualterio Ansaldi, mientras seguían las actuaciones. En estos días se conoció el pedido de ADN de la jueza de Tartagal, Claudia Yance.
Sin embargo fuentes cercanas a la fiscalía del norte provincial, dejaron trascender que el día 1 de septiembre Armando Cazón, había solicitado al juez Nelso Aramayo, la orden para la toma de muestras de ADN tanto de la nena como del supuesto padre, con quien convivía.
La toma de muestras se concretó y el 6 de septiembre fueron llevadas al Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF). El miércoles 7 de diciembre y con los resultados en la mano, Cazón, imputó a la pareja el delito de sustracción y/o compras de bebés.
Es de suponer que el resultado fue negativo, máxime si la mujer habría reconocido que la nena fue traída desde Buenos Aires. Hoy la causa está en manos del juez Federal de Orán, Gustavo Montoya, atento que el delito tiene ese alcance.
Por otra parte un hermano de la nena en cuestión, también fue incluído en una causa similar, que está siendo investigada. El abogado Sergio Heredia que defiende a la pareja, habría recusado a la jueza Yance, por privación ilegítima de la libertad, al alojar a los niños en un hogar.