Juan Daniel Abán es el referente del grupo, que lleva siete años trabajando en Salta de manera voluntaria.
Lo integran actualmente siete agentes penitenciarios, pero en otros momentos estuvieron presentes bomberos y gente del ejército, entre otros miembros de fuerzas de seguridad.
“Todos estamos capacitados en lo que hace a rescate en altura, rescate acuático y búsqueda de personas”, dijo Abán al hacer referencia a quienes integran el grupo, que también cuenta con la colaboración de dos perros entrenados.
Colaboración con el CIF
“El trabajo que se hizo estaba planificado con el fiscal Ramiro Ramos Ossorio, quien desde el principio estuvo dispuesto al diálogo ya que permitió que le hicieramos sugerencias, poniendo a disposición vehículos para que nos llevarán hasta los lugares donde debíamos movilizarnos”, sostuvo Abán.
Al respecto dijo que se había realizado una cuadrícula de búsqueda en el sector de la cornisa, que se iniciaba el día 14 de este mes incluyendo 31 km. “El hallazgo se produjo en la mitad de lo planeado. En algunos sectores se dificultaba más que en otros, ya que hay abismos, quebradas, lo que hacía que en lugar de los perros bajaran los hombres colgando de cuerdas”, señaló el rescatista.
En una de las jornadas el terreno fue tan agreste que solo rastrillaron 300 metros, por la cantidad de bajadas abruptas. Los rastrillajes se realizaban durante 10 horas por día.
Hallazgo del cuerpo
Dos integrantes del grupo, que por este hecho estuvo conformado por 10 personas, con la colaboráción de bomberos, encontraron el cuerpo. “Se preservó la zona y se dio aviso de inmediato al fiscal”, dijo.
“El cuerpo estaba en una caída de 8 metros, si hubiera rodado 5 metros más adelante ya iba a caer en un descenso más profundo, tal vez demorábamos un poco más pero lo mismo lo íbamos a encontrar”, aseguró.
Los animales depredadores no llegaron porque la circulación es más abajo y las aves tampoco porque no estaba visible desde arriba.