En ese marco en esta semana que se inicia se conocerá la sentencia que el Tribunal de Juicio, integrado por Victoria Montoya, Bernardo Ruíz y Pablo Farah, deberá dictar en el juicio que se sigue a Juan Carlos Gómez Paz por homicidio simple y a Mario del Barco y Sebastián Guitián, por encubrimiento agravado.
Así las cosas, en la vía pública se advierte que sobre los carteles que la familia de Javier Trogliero pegó en distintas partes de la ciudad, como el shopping, la avenida Uruguay, esquinas de semáforos, los alumnos de Gómez Paz escribieron frases a favor del docente.
¿Presión?
De acuerdo a lo que plantearon los jóvenes, "se está tratando de presionar una condena que agrave la situación de los tres imputados, y nosotros entendemos que debe ser algo justo y no algo exigído".
El caso sigue generando controversia, porque se trata de familias conocidas que se vieron envueltas, de uno u otro lado, en esta trágica historia; dejando una vez más a la luz la relación del alcohol y reacciones que no benefician, sino que enlutan a todos. Uno de los amigos que formaba parte del grupo hoy no está, otro está detenido y dos, si bien llegaron libres al juicio, no deben haber tenido en estos últimos tres años la vida que desearon o imaginaron.
El alcohol en exceso
El hecho se registró la madrugada del 1 de junio de 2013 en barrio El Huaico, tras una fiesta en la que se produjo una fuerte ingesta de alcohol, que llevó a que en el análisis de alcoholemia Trogliero diera 1.5 gramos de alcohol por litro de sangre; Gómez Paz, 1; Del Barco, 0.4 y Guitián, 0.6.
Esto lo mostró un perito del Cuerpo de Investigaciones Fiscales, durante su testimonial frente a los jueces, donde además señaló que no se le efectuó análisis toxicológico al estómago de Trogliero debido a que no se recibió material suficiente, todo esto de la mano de los reclamos constantes de la defensa de Gómez Paz, que ejerce Pedro García Castiella, quien solicita de manera permanente esos análisis para conocer si la víctima había o no consumido cocaína.