La denuncia fue presentada por el diputado nacional Rodolfo Tailhade (FPV), y los delitos son múltiples: administración fraudulenta en perjuicio de la Administración Pública Nacional; abuso de autoridad; incumplimiento de los deberes del funcionario público; asociación ilícita; cohecho pasivo y activo; negociaciones incompatibles, y tráfico de influencias.
Sin embargo, el denunciante también reclamó que se investigue si las conductas de Sturzenegger y Caputo, y al menos otros dos empresarios fueron "delitos contra el orden económico" por haber provocado el alza del precio del dólar de $20 a $25.
De acuerdo a lo planteado por el legislador del FpV el Gobierno Nacional y el BCRA incentivaron un "esquema de desregulación financiera y cambiaria que claramente alentó la especulación y la generación de ganancias millonarias por parte de sectores muy vinculados a quienes hoy dirigen la economía, a la vez que ha dejado a nuestro país expuesto frente al movimiento de esos capitales".
La maniobra -de acuerdo a lo dicho por Tailhade- derivó en un "enorme beneficio económico" para los "fondos especulativos" por tres frentes: la eliminación de las restricciones al ingreso y salida de capitales, el 'carry trade' y las tasas de interés de las LEBACS y la eliminación de los plazos para que los exportadores liquiden sus divisas.
"Constituyeron la columna vertebral de un sistema de fuga de capitales", afirmó el legislador; quien así mismo estimó que en tres meses, entre marzo y mayo de 2018, se pudieron fugar al menos u$s 10.000 millones por permisos laxos.
"La combinación de desregulación cambiaria, alta inflación y un dólar barato, fruto del propio modelo económico, gestaron el ambiente propicio para la fuga de capitales", afirma del diputado kirchnerista, quien luego agregó: "Los dólares que vinieron a raíz del profundo endeudamiento externo, volvieron al exterior como ganancia de los especuladores".
La denuncia de Tailhade también va directamente contra directivos del JP Morgan, el banco de inversión que supuestamente "jugó un rol clave" en la corrida cambiaria porque fue "el primero de los inversores institucionales en rematar sus posiciones de Lebacs y generó un efecto réplica en el resto".