A su vez el FMItambién pronostica que el crecimiento de la economía estará por debajo de las proyecciones oficiales del Gobierno de Macri. La suba de precios que proyecta el FMI para 2017 (y para el año que viene) no coinciden con las estimaciones que hace el Gobierno.
El organismo presidido por Christine Lagarde ratificó un crecimiento del 2,2% para la economía en 2017, contra el 3% que proyecta el último Monitor de la Economía Real, el informe de uso interno que se prepara todos los meses desde el Ministerio de Producción; y así dio muestra de seguir de cerca la economía mes a mes.
En proyecciones de inflación es más marcada entre lo que estima el FMI y el gobierno argentino. Para el Banco Central el techo de la inflación para el año en curso se ubica en el 17%, en tanto que el Fondo espera una suba en promedio de los precios al consumidor del 25,6% y que la inflación alcance 21,6% durante 2017 descendiendo recién a un promedio de 18,7% para el 2018.
Hacia fuera, ese porcentaje se mantiene firme en las declaraciones públicas de los funcionarios. Hacia dentro, algunos comenzaron a dudar de la cifra durante el último mes, más en línea con un crecimiento del 2,8% que surge del promedio de consultoras y bancos privados.
El Fondo había estipulado en octubre del año pasado que este año la inflación alcanzaría el 20,5 por ciento pero ahora empeoró sus pronósticos en cinco puntos. Las discrepancias con las proyecciones oficiales también se reflejan en el crecimiento anual, porque el FMI considera que llegaría a 2,2 por ciento este año en curso, lejos también del 3,5 previsto por las autoridades nacionales.