El delantero, quien puso en riesgo la vida de los niños que caminaban por la calle rumbo a la escuela, se negó a hacerse el control de alcoholemia y tuvo un cruce de palabras y tratos agresivos con los oficiales.
Según declaró Diego Kravetz, secretario de seguridad de Lanús, los policías actuaron según las normas y fue Centurión el agresivo y hasta intentó sobornarlos. "Yo tengo plata para arreglar esto, es una boludez. Te puedo cubrir todo el mes", dijo el jugador de la Academia en un video difundido por las redes sociales. Por esta negativa al control y sus actitudes, la policía le secuestró su auto, un BMW negro.
El jugador fue licenciado y deberá reincorporarse al plantel mañana.
“Tiene una enfermedad”
El nuevo escándalo con el ex Boca y San Pablo alteró los ánimos en Racing y el presidente, Víctor Blanco, admitió que el jugador tiene un problema. "Hablé con Centurión y está arrepentido. Sabemos de sus cualidades, pero también tiene una enfermedad y hay que ayudarlo a salir, no crucificarlo", dijo el dirigente.
“Que actúe la Justicia. Del lado de Racing hay que apoyarlo desde la parte humana. En lo que respecta a su vida privada no podemos estar las 48 horas cuidándolo. A Racing esto lo afecta en su imagen, por eso lo hablaremos con el departamento de legales y con Centurión”, explicó el titular de la Academia.
“En el club tenemos un psicológo que se ocupada personalmente de cada jugador, y éste es un caso que lo tenemos en cuenta. En el contrato que firman los jugadores, todos tienen el reglamento de conducta que deben cumplir”, subrayó.
